Antes de la fundación de Resistencia

Los convenios que firmaron gobernadores de Corrientes con los caciques indígenas del Chaco

Por Roli Pérez Beveraggi


El 11 de enero de 1750, el teniente gobernador de Corrientes, Nicolás Patrón conviene con el cacique Ñare, de los abipones, la instalación de una reducción sobre el rio Negro, cerca de Corrientes. En las tratativas intervino el jefe abipón Ichoalay. Como resultado del convenio se fundó, 7 meses después, la capilla de San Fernando del Rio Negro.

Un poco más de 100 años después, el 29 de febrero del año 1864, el gobernador de la provincia de Corrientes, brigadier Pedro Ferré, firmó un convenio con los caciques chaqueños, para la construcción de un camino que, partiendo desde la costa chaqueña, frente mismo a la ciudad de Corrientes, llegara a Santiago del Estero.

Los caciques indios chaqueños eligieron para representarlos al cacique Naponari o Napognari, pero estuvieron además presentes en la histórica convención y firmaron el acta, los caciques Leoncito, Satoqui, Dalichiqui, Niquiliqui, Lagañote, Pascual, Mariano, Sacoli, Antonio Benítez, Pedro Coronado, Agustín, Ceferino, Bartolo y José Tomás; como lenguaraces actuaron Nicolás Saravia y Juan Torres. Por el gobierno correntino, suscribieron el acta, Pedro Ferré, brigadier comisionado y Vicente Saravia, secretario.

El gobierno nacional, por intermedio de Ferré, ofrecía tierras a los indios alrededor de los pueblos que se levantarían en el camino que atravesaría el Chaco. También protección para quienes trabajaran, y herramientas. Pedía, en cambio, paz y fidelidad.

Los jefes indígenas, que no siempre fueron hostiles al progreso en el gran Chaco, luego de escuchar a los lenguaraces contestaron: “Que aceptaban con gusto las ofertas que acababa de hacerles el gobierno y se comprometían por su parte, a respetar la autoridad de éste y obedecer sus disposiciones, como asimismo a no hostilizar de ningún modo las poblaciones y cantones que se estableciesen, ni menos a las personas que transitaran por el camino y que, si era necesario, acompañarían al ingeniero que estudiaría el lugar para el camino, dejando en garantía de sus promesas sus mujeres e hijos que recogerían al regreso del viaje".

Tanta prueba de la buena fe del indio, fue luego burlada por el blanco, que no cumplió, integralmente, sus compromisos, obligando al aborigen a hacer lo mismo.

La reunión se llevó a cabo en la ciudad de Corrientes, en la casa particular del gobernador Pedro Ferré. El acta consigna que los caciques chaqueños firman con sus signos. Un año después se fundaba la Capilla de San Buenaventura del Monte Alto.