
“Las estaciones somos el último eslabón y nuestro ingreso a fin de mes se reducirá entre 25 y 30%”
Miguel De Paoli, referente del mercado, repasa las complicaciones en la producción de combustibles y la caída proyectada de la demanda y los ingresos de los estacioneros.

Las estaciones de servicio de la ciudad, con poco movimiento y medidas extremas de seguridad para su personal.
“Las estaciones somos el último eslabón. Tenemos costos fijos y nuestros ingresos proyectados al 31 de marzo arrojan una reducción del 25 al 30%”, advirtió Miguel De Paoli, referente del mercado de los combustibles en la provincia, en diálogo con Agencia FOCO.
“La cuarentena impuso un brusco descenso de la demanda y la industria está empezando a frenarse para que no abunde el producto terminado”, explicó el empresario, quien en ese sentido resaltó que “el problema es qué se hará con los sobrantes, suponiendo que sobre más nafta que gasoil, porque al universo de vehículos que no andan por la calle, que no circulan, no consumen combustibles”.
“Llevará un tiempo reacomodarse cuando comience abril y está el problema de las estaciones que somos el último eslabón, que tenemos un costo fijo”, indicó De Paoli.

“Ojalá este sacrificio sea profundo y de una sola vez, porque si se proyecta en el tiempo el efecto de la pandemia será cuantificado en pérdidas humanas e incalculables pérdidas económicas”, alertó De Paoli.
A la vez, reconoció la preocupación en el sector de los trabajadores de estaciones “porque en estas situaciones de pérdida absoluta de rentabilidad, se generan problemas de pago de salarios y compromisos tributarios”. Por eso consideró que pueden presentarse inconvenientes “porque nadie tuvo en cuenta una brusca pérdida de ingresos” que generarán tantos días sin actividad.
En otro punto, el empresario explicó el funcionamiento del mercado y los perjuicios que traerá el aislamiento social obligatorio, con poco movimiento y cada vez menor actividad económica. “La inmensa mayoría no se da cuenta, pero el mercado de combustibles se parece bastante al de la carne. No podés hacer oferta de lomitos porque vas a necesitar tantas medias reses cuanto el público demande de ese solo corte. Por cada barril de petróleo hay proporciones de naftas, gasoil y lubricantes”, puso como ejemplo para comparar.
Así, explicó que “es un tema que no pudo prever la industria porque tiene sus tiempos y plazos para extraer, destilar y tener los distintos productos listos para la venta”.
Sacrificio profundo y de una sola vez
“Ojalá este sacrificio sea profundo y de una sola vez, porque si se proyecta en el tiempo el efecto de la pandemia será cuantificado en pérdidas humanas e incalculables pérdidas económicas”, resaltó el empresario, quien, como la gran mayoría, tiene la misma incertidumbre: “No sabemos qué pasará. Estamos viviendo el día a día”.
Con respecto a las estaciones de servicio, subrayó que “la idea es preservar la dotación de personal”. Por eso, aprovechando el escenario de menor actividad, las empresas comenzaron a otorgar francos adicionales. “Sabemos que un empleado que no viene es uno menos expuesto”, enfatizó.
Asimismo, explicó que en la actividad “se toman todas las precauciones que el gobierno nacional difunde en los protocolos de actuación en cuanto al aseo personal, la distancia con los clientes y la protección con barbijos. “Es una actividad en donde dependemos del contacto personal con los clientes”, indicó
A la vez, reveló que el mínimo movimiento que existe es para abastecer en su mayoría a ambulancias, patrulleros y demás vehículos vinculados a la seguridad y control del cumplimiento de la cuarentena.
Con tarjetas

Por último, pidió a los clientes que concurren a las estaciones de servicio efectuar el pago con medios electrónicos, evitando así la manipulación de dinero en efectivo. Así, resaltó que todas las bocas de expendio reciben tarjetas de débito y crédito. Además, esos medios son necesarios ya que no hay clearing bancario hasta el 2 de abril, por lo menos, y no es posible la acreditación de ese dinero recibido en las cuentas bancarias.
